D. José Calvo y Martín (1814-1904)1. Nació en Aviñón, modesto pueblo de la provincia de Zaragoza, el 7 de febrero de 1814.
Es sabido cuánto avanzan las ciencias médicas en un abrir y cerrar de ojos; qué decir cuando hablamos de décadas. Lo que hoy nos parece superchería no fue, hace tanto tiempo, otra cosa que ciencia puntera.
Es esto, precisamente, lo que rodea de una atmósfera especial los tratados antiguos de medicina, enfermería u otras disciplinas de la salud. Un ejemplo es el Manual para el uso de practicantes redactado por el Doctor D. José Calvo y Martín, Catedrático de Clínica quirúrgica de la Facultad de Medicina de la Universidad Central, hoy Universidad Complutense de Madrid.
El Doctor Calvo destacó no sólo como catedrático de Clínica Quirúrgica. Estudió medicina entre las universidades de Barcelona, Montpellier, y Madrid, y cursos de medicina experimental en París. Fue también Catedrático de otras asignaturas, como de «Especialidades» (una enseñanza entonces novedosa que se dividía en venereología, estudio de la sífilis y «oculística»), y de «Ampliación de la Higiene Pública y Estudio Geográfico Histórico de las Enfermedades Endémicas y Epidémicas».
Compaginó su cátedra con el decanato de la Universidad Central y su puesto de Senador, primero por la Universidad de Zaragoza, y posteriormente por Calatayud; y con el «Consejo de Instrucción Pública y el de Sanidad» del cual fue vicepresidente cierto tiempo.
Obtuvo por mayoría aplastante la presidencia de la Real Academia de Medicina, a los ochenta y ocho años de edad, tras dos bienios de Vicepresidente, y cincuenta y tres años como «Académico de número». Desempeñaría este cargo hasta su defunción, dos años después.
Entre su legado escrito se encuentran los programas de dos asignaturas médicas, una especialidad, un estudio biográfico, multitud de discursos, y el Manual para el uso de practicantes, publicado en Madrid en 1886 por la imprenta Nacional, en el que nos centraremos a continuación.