Cad Aten Primaria 2017; 23 (2):30
musicoterapia más cartas (D). A todos se le realizan las mismas valoraciones, una basal y otras cada tres meses hasta completar el año de seguimiento. Los grupos C y D participan en el programa de intervención psicomotriz con musicoterapia (dos horas a la semana con ejercicios predefinidos y siempre iguales). El grupo B y D juegan a las cartas dos horas a la semana. Las escalas de valoración utilizadas son el Lawton Brody (funcionalidad) y el test de Tinnetti corto (equilibrio), evaluándose especialmente su evolución. Se recogen variables sociodemográficas habituales. Se realiza la estadística descriptiva e inferencial. Estudio limitado por los sesgos de selección y el número de pérdidas.
RESULTADOS: Edad media 74,9±6,5 años con un 67% de mujeres. La puntuación media en la escala de Lawton Brody al principio del estudio es de 6,5±2. La diferencia de puntuación en esta escala entre la primera evaluación y la última es de un 12% en negativo
CONCLUSIONES: El programa de intervención psicomotriz con musicoterapia parece efectivo en la mejora del equilibrio con sus posibles efectos en la prevención de caídas y deterioro consiguiente. Los pacientes que más empeoran su funcionalidad son aquellos que no realizan ninguna actividad reglada.
La monitorización continua de glucosa es más sensible en la detección de alteraciones glucémicas que la HbA1C y la glucosa basal en ayunas: estudio en una población española no diabética (Resultados de Investigación– RI11)
Vanessa García-Ciudad Young, Manuel Fernández-Arean, Marcos Pazos-Couselo, José Manuel García-López, Manuela Alonso-Sampedro, Francisco Gude
Los parámetros utilizados en la práctica clínica para valorar el estado glucémico son la glucosa basal en ayunas (GBA), la sobrecarga oral de glucosa (SOG) y la hemoglobina A1C (HbA1C), aunque no siempre indican el mismo estado glucémico. La monitorización continua de glucosa (MCG) ofrece una información más detallada del comportamiento de la glucemia; es por ello que en este estudio evaluamos cuál de estos métodos es más sensible en la detección de la disglicemia.
Para evaluar la capacidad de la MCG en el diagnóstico precoz de la hiperglicemia, se recogieron un total de 1521 días completos de datos de MCG válidos en una muestra de una población española no diabética en condiciones reales de vida, así como los valores de GBA y HbA1C correspondientes. Los criterios de exclusión fueron: embarazo, enfermedad renal, enfermedad hepática, y la toma de medicación que afecta a la glucemia.
El 21% de los participantes fueron clasificados como prediabéticos en función de la GBA y/o HbA1C. Los valores medios de 24 horas de la glucosa en sangre (MBG) en los individuos normoglucémicos fueron de 5.7 ± 0.4 mmol/L (102.6 ± 7.2 mg/dL), pasando el 97% del tiempo con la glucosa en rango normal. El 73% de los sujetos normoglucémicos estuvieron en algún momento por encima del rango de diagnóstico de la intolerancia a la glucosa, e incluso un 5% estuvieron por encima del rango de diabetes. Además, estos mismos individuos tuvieron variaciones glucémicas, medidas mediante SD y MAGE, que fueron similares a las encontradas en sujetos clasificados como prediabéticos a través de criterios estándar. El 44% de los individuos normoglucémicos estuvieron una media de 23 minutos por día en el rango de hipoglucemia.
Conclusión: La MCG es un mejor indicador de cambios anormales precoces en la glucemia que la GBA o la HbA1C.
Financiación: Este Proyecto de investigación fue financiado por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), proyectos PI16/01395, PI13/02594 y PI11/02219, cofinanciados con fondos FEDER. M.A.S fue financiada con cargo las redes de investigación del ISCIII Red de Investigación en Actividades preventivas y promoción de la salud en Atención Primaria (RD12/0005/0007 y